Jóvenes Altruistas Con Raíces Armenienses

Cipotada Chula,

No cabe duda que la sangre armeniense es preciosa y preciada; no cabe duda que ella es transportadora de esos grandes valores que nuestros abuelos y padres muy sabiamente han sabido inculcar en las nuevas generaciones y no cabe duda que esta sangre, acude al llamado inmenso, intenso, invisible e indiscutible que hace el corazón "buchón" para que sus hijos/as se junten, se hermanen y que así se solidaricen con aquellos/as menos afortunados/as.

Y eso es precisamente lo que la bella hijita de mi hermano Francisco "Paco" Zepeda, Francesca es lo que nos ha demostrado con sus acciones llenas de humildad, ternura y sobretodo amor al prójimo durante esta pasada "Semana Santa" cuando, al saber del trabajo tezonero, desisteresado, voluntario y ejemplificante de su abuelita (doña Finita) y otras señoras armenienses quienes forman el grupo "Señoras de la Caridad", decidió comentar a sus amiguitas de la escuela de su deseo de contribuir a esta causa, y junto a 3 de ellas quiénes vieron en su deseo una excelente oportunidad de participar en un acto noble y edificante, se dedicaron a colectar fondos a través de ventas de galletas, dulces, etc. así como en la colección de ropa para en lugar de irse de vacaciones, mejor ir a nuestra Armenia y no solamente hacer entrega de estos fondos, si no que también participar activamente en las diversas actividades asociadas a la construcción de la "Casa para Indigentes" que las Señoras de la Caridad están en la actualidad construyendo.

Al saber yo de esto, inmediatamente supe que tenía que comentarlo a todos/as ustedes mis hermanitos/as armenienses para que aprecien junto a mí, este hermoso gesto de la bella Francesca así, como que para que se me unan en felicitarle y agradecerle por tan noble acción.

Adjunto la dirección electrónica de un sitio en el cual, Francesca hace un detallado relato sobre esta experiencia y sobre sus planes, que usted puede apreciar aquí:

http://voydoysoy.yolasite.com/

Con mucha humildad y fuerte agradecimiento, espero que Francesca sepa que estamos muy orgullosos de nombrarla "una bien nacida armeniense".

Y ya me voy porque no he terminado de pastear la yegua.


Salú,
El Monsiour.