Querida hija...
Lejos estoy y no la tengo a mi lado. A pesar de haberle escuchado por teléfono y de ver sus fotografías, siento un vacío profundo el que solamente se alivia, al traer los recuerdos de felicidad, alegría, locuras, aventuras, juegos y demás cosas divertidas que juntos hicimos como familia durante esos maravillosos años de su infancia.
Parece como si hubiera sido hace poco, cuando usted nació y trajo una inmensa alegría a mi ser desde el primer momento que la vi, en el hospital al nacer, tranquila sin llantos ni lloriqueos, con ese su largo y colocho pelo que le hacía parecerse a mi querida mamá (QEPD), sinembargo, ya usted es una señorita, ¡bien bella por cierto! de la cual me siento muy orgulloso, al reconocer que usted es una persona de valores y de utilidad para la sociedad y le pido al Todopoderoso que la mantenga así, con salud, felicidad y bonanza, por muchos años.
Y mire usted que coincidencia mas bonita, al mudarme de casa, me puse a hurgar en cajas y maletas en busca de unos documentos y de casualidad, encontré esta cartita que usted me mandara una vez, cuando usted tenía 11 años, ¿se recuerda? Por supuesto que me agrada mucho esta carta, por eso la guardo con amor, me gusta mucho todo lo que usted ahí me dice pero, hay algo que me impresiona mucho y que habla de su carácter de persona honesta y solidaria: cuando usted se culpó de haber roto la llave del sistema de riego que teníamos en el jardín, para proteger a su primo Ricky, quien había sido el que lo quebró; este gesto noble de su parte, significa aun ahora, mucho para mi y me hace sentir mas orgulloso de usted. Querida hija, si no se acuerda de esta carta, véala abajo.
La quiero mucho, querida mía y le pido a Dios que le bendiga con muchos años mas.
Happy Birthday, baby!!!
Dad
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