Cipotada chula,
Me lleno de mucha alegría al comentarle que gracias a Dios, estoy en camino a cumplir mis 3 resoluciones que hiciera para cumplir en este año 2015.
Una de ellas (y la que es la más importante de las tres) tiene que ver con mis hijos, y es esta:
¡Reunirme nuevamente con mis hijos, para re-establecer nuestra relación a niveles que gozábamos hace unos 4 años!
En vista que mi labor como padre fue siempre buena, mis hijos han aceptado con gusto mi propuesta y en una manifestación clara de este propósito, mi querido hijo Frank Edgardo, me ha hecho llegar esta tarjeta postal, para que guarde la fecha y haga planes de asistir a su boda con su bella y adorable novia, Sayra, en el evento civil que se desarrollará en las playas del lugar turístico mexicano, Puerto Vallarta.
Ya tuvimos una experiencia maravillosa con mi hija mayor, Cindy Francine quien se casara con el respetable joven Héctor, en una ceremonia celebrada en Cancún hace unos años; ahora es el turno de Frank.
Con mucha alegría y satisfacción de padre, comento esta maravillosa noticia y ya puede usted imaginarse como me siento de orgulloso, y con humildad comparto esta noticia con usted.
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